jueves, 14 de enero de 2010

Es increíble pensar que las acciones que ejercemos cada segundo podrían cambiar el resto de nuestras vidas.
Y me refiero a elecciones pequeñas, sin importancia. Como tomar café o té. Porque ésto después puede desencadenar una falta del producto, lo cual me puede llevar al supermercado, y puede causar un encuentro casual.

Si algo tan pequeño puede cambiar tanto... a la hora de elegir cosas realmente importantes, ¿Cómo es posible no sentirse presionado? ¿Cómo hace la gente para no darle tanta importancia? ¿Cómo hacen para que la distancia entre un y un no, no sea tan gigantezca?

Yo realmente no puedo. Me gustaría enormemente pensar menos. Me gustaría poder arriesgarme por lo que siento en el momento. Y ni siquiera... porque hablar de sentimientos hace que pase a tomar importancia. ¿Por qué no puedo guiarme por una intuición? ¿Por qué tengo que tener todo tan planificado siempre?

Me cansé de jugar a la vida como si estuviese jugando un partido de ajedrez. Me cansé de los juegos, de los planes, de pensar y pensar. Me cansé de las preguntas y repreguntas sobre por qué las cosas suceden como lo hacen.

Es así, y punto. No se puede hacer nada al respecto. Lo que puedo elegir, es como vivirlo.

3 comentarios:

  1. La vida son los detalles.
    Mientras elijas lo que tengas ganas de tomar en ese momento no te vas a arrepentir.

    ResponderEliminar
  2. Lo que uno muchas veces no entiende es que la intuición también es una forma de inteligencia.
    Entonces hay que tenerle un poco de confianza a la intuición, y dejarse llevar.

    ResponderEliminar
  3. aunque planifiques , todo sale como realmente tiene que salir. hay que hacer todo lo que uno quiera ( sin implicar a otros) y ser feliz con tu concepto de felicidad.

    ResponderEliminar