lunes, 12 de marzo de 2012

En algún punto, creo que no sólo elegimos personas inadecuadas por esta enseñanza típica aprendida de novelas y películas donde sólo el amor imposible es romántico. Sino también porque de esa manera uno se asegura de que va a sufrir, y así expía algún tipo de remordimiento o culpa. Uno sabe, en el fondo, que no va a funcionar y así sufre.

Por eso es que después de que te rompen el corazón, tenés el nivel ideal de vulnerabilidad para ser feliz con alguien más.
Volver a cometer los mismos errores y volver a sacar las mismas conclusiones.

lunes, 5 de marzo de 2012

Se olvidan de que la vida es para disfrutar, no padecer. Se olvidan de que todos los días eligen lo que van a hacer ese día. Se olvidan de que el tiempo y empeño que le ponen a algo no tendría que ser una distracción de una realidad que no les hace bien, sino ser parte de la realidad en la que sos feliz.

domingo, 4 de marzo de 2012

Me importa que sea pasional.
Amor-odio, no es tan distinto.
La ansiedad que despierta el enamoramiento, la intolerencia y la poca capacidad de darle un cierre a pesar de tener intenciones de hacerlo -con la mente, con la lógica-, no tan diferente.
La idealización, la decepción ante una respuesta inesperada, no están tan alejados.

Me importa que sea desenfrenado, vertiginoso.
Me importa que no despertarte algo de forma incontrolable se reduce a lo menos romántico que me puede pasar en la vida.